Criminalidad: Mano Dura, Prevención Y Educación
En los últimos días he visto un número plural de titulares en los medios de comunicación que aluden al tema de la criminalidad en Panamá y podrían especularse muchas causas, considero que a falta de acción del gobierno actual en la implementación y ejecución de los proyectos ha generado un incremento en la tasa de desempleos pero esta no es la única razón, porque para mitigar ello deben existir las políticas de incentivo a la micro, pequeñas y medianas empresas.
La falta de presencia policial definitivamente obedece a la necesidad de aumentar el pie de fuerza, pero estes no es el único motivo, si las propias unidades policiales no trabajan en condiciones dirigidas a la excelencia, ni mucho menos se destinan presupuestos para su formación integral.
Los programas de rehabilitación y reinserción son la única solución a la mano para enfrentar la delincuencia. No tenemos cadena perpetua ni mucho menos, pena de muerte. ¿Cómo cariño no vamos a creer en la reeducación del individuo? Hace falta involucrar más sectores de la población en este compromiso de todos. ¡El amor con firmeza sí funciona!
Los programas de “barrios seguros” se fundamentan en ella y, aunque su efecto es más demorado que la “mano dura”, permanecen en el tiempo y tienen un espectro de acción mucho más amplio que esta última, ya que impactan en sus familias. Créanme que un pandillero que descubre sus dotes musicales, cuando toca un trombón o un violín en su casa, se siente la diferencia no solo en una sino en 10 personas.
El Gobierno debe continuar con estas políticas y establecer criterios de integración con las entidades responsables de definir las políticas de los otros sectores arriba mencionados y a todos los ciudadanos nos corresponde respaldar este tipo de acciones que construyen destinos sin coartar el derecho a la superación.
Según el reporte sobre Delincuencia Organizada Transnacional en Centroamérica y el Caribe, elaborado por la Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Undoc), entre las amenazas sobre nuestros países, se destaca el tráfico de cocaína, como el principal foco de grupos delincuenciales organizados y violencia. Luego le siguen el tráfico de migrantes, que incluye trata de mujeres y niñas, así como la falta de control de armas de fuego en Centroamérica.
De acuerdo a este informe, desde 2010, se incrementaron los porcentajes de la población que se sienten inseguros en el país. Las políticas de Estado deben estar dirigidas a considerar las políticas de inversión, empleomanía e institucionalidad pero, a fin de cuentas, la seguridad redundará en la educación.