Los rumbos errados del Gobierno
Cada día que pasa, las cosas empeoran bajo el mandato del presidente Juan Carlos Varela. Creció la inseguridad, se desmejora la educación, la salud anda manga por hombro y, al paso que vamos, el agua potable desaparecerá. Mientras tanto, los miembros del equipo de trabajo del gobierno actual gastan dinero del Estado en viáticos y en viajes. ¿Y dónde están los medios de comunicación que no mencionan nada malo de este gobierno? ¿Dónde están los dirigentes gremiales que siempre protestaban en las calles? ¿Dónde está la Iglesia católica que no habla al respecto y que, en el período anterior, era como un partido político más?
Todos guardan silencio y pareciera que todo estuviera bien. La televisión no difunde los errores de este gobierno, un ejemplo claro fue la abstención de Panamá en la votación para abordar el problema limítrofe entre Colombia y Venezuela, ante la Organización de Estados Americanos. Ningún medio investigó a fondo el porqué de la abstención, cuando a la mayoría de los países latinoamericanos le preocupa la situación sociopolítica de Venezuela. Ese era el momento de tratar de iniciar un cambio positivo en ese país, pero nuestro representante se abstuvo. ¿Qué habrá detrás de esto?
Los dirigentes magisteriales también tienen la boca cerrada. La actual ministra de Educación es fiel ejemplo de la mediocridad, con escuelas que se caen a pedazos y alumnos y personal docente que protesta para llamar la atención por los problemas que padecen, ¿Por qué los dirigentes Yadira Pino y Andrés Rodríguez callan? ¿Se los tragó la tierra?
Otros líderes sindicales tampoco se manifiestan como antes. Con el tema de la descentralización, que se discute ahora en la Asamblea Nacional, era para escucharlos hablar enérgicamente, pero ninguno dice nada. Otro grupo que calla es la Iglesia católica. Antes, el arzobispo José Domingo Ulloa hablaba todas las semanas acerca de la inseguridad en el país, de la inestabilidad familiar y de los gastos públicos que hacía el gobierno de Ricardo Martinelli.
Leí en los medios una investigación sobre los gastos por los viajes y viáticos en que incurrió la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), ningún medio televisivo habló del tema. Quisiera saber si es que yo estoy soñando y aún no despierto, porque la realidad que observo es diferente a la que me muestran los medios. Panamá atraviesa por tiempos difíciles, pero este gobierno no hace nada por solucionar los problemas del agua, por ejemplo, que debería ser un tema de Estado.
¿Por qué el Presidente de la República no ha nombrado todavía a los dos magistrados que dejaron sus puestos? ¿Será que espera que todos renuncien para, entonces, poder nombrar a los nueve magistrados?
En mi opinión, las cosas siguen igual o peor que en el gobierno anterior de Cambio Democrático.