Movin rechaza intimidaciones, amenazas y público hostigamiento a fiscales y jueces

El Movimiento Independiente por Panamá (Movin) expresó su profunda preocupación por la “constante intimidación, amenazas y público hostigamiento” que padecen los fiscales y jueces que intervienen en los procesos por delitos de corrupción, y los insta a no ceder en sus tareas “ni una pulgada”.

 “ No hay duda que tales amenazas están orientadas a impedir el fundamental ejercicio de nuestras instituciones de justicia, en la persecución de inaceptables conductas y sancionar a los responsables”, indicó Movin en un comunicado que circuló este lunes, 21 de marzo

“ El reto democrático de Panamá en este lustro es superar la impunidad e instalar una justicia y una institucionalidad de control que genere confianza pública”, agregó.

La semana pasada, la procuradora general de la Nación, Kenia Porcell, informó que en los últimos dos años se han iniciado procesos a 294 personas –entre particulares, proveedores del Estado, exfuncionarios del pasado gobierno y servidores de la actual administración- por la posible comisión de delitos contra la administración pública.

Estos casos, en conjunto, habrían causado una lesión patrimonial al Estado calculada en $670 millones. Hasta ahora, se ha logrado la cautelación de bienes por $120 millones.

Temen archivo de ley sobre justicia comunitaria de paz

Sectores de la sociedad civil, que impulsan la aprobación de un proyecto que crea la justicia comunitaria de paz, temen que sea engavetado por el pleno de la Asamblea Nacional que suspendió sus discusión en segundo debate.

El procurador de la Administración, Rigoberto González, cuestionó que los diputados manejen este tema desde una óptica política y sin pensar en el clamor de la ciudadanía.

Apuesta por la conciliación

La propuesta legislativa para instaurar en Panamá la justicia comunitaria de paz, una vieja aspiración de sectores de la sociedad civil, y de algunas autoridades, se enfrenta a altibajos en el pleno de la Asamblea Nacional.

La discusión en segundo debate del proyecto 205, que instituye la mencionada figura, fue suspendida en el Legislativo a petición de varios diputados que adversan artículos de la iniciativa.

Se oponen al proceso de selección y nombramiento de los jueces de paz, figura que reemplazaría a los actuales corregidores y jueces nocturnos.

La polémica

El artículo de la discordia y que fue repudiado por varios padres de la patria, entre ellos Carlos 'Tito' Afú, del partido Cambio Democrático, es el que indica que el nombramiento del juez de paz se hará a través de un proceso público de convocatoria. Estará a cargo de una comisión técnica distrital, ente que a su vez estará conformada por instituciones gubernamentales y dos miembros de la sociedad civil organizada.

De este proceso debe surgir una terna con los nombres de los aspirantes. Luego, según el proyecto, el alcalde del municipio correspondiente seleccionará a la persona que considere que tiene el perfil para ser juez de paz.

En las zonas urbanas, el aspirante debe ser abogado, y en las áreas rurales, debe haber culminado la educación media. En la actualidad, no se exige nivel académico para ser corregidor.

Por la cuota de poder

Los diputados críticos de la propuesta proponen que los consejos municipales -integrados por los representantes de corregimiento del distrito, sobre el cual tienen algún control político- participen de este procedimiento de escogencia, estrategia que de acuerdo a consultados, podría favorecerles dada la influencia política que tendrían en esta selección.

Carlos Lee, presidente de la Alianza Ciudadana Pro Justicia, asegura que los diputados, “tienen un número de representantes de corregimiento que son de su partido y pueden pelear y negociar. Es un tema de negociar espacios de poder”, aseguró.

Añadió que con la intención de que se apruebe el proyecto cuanto antes tratarán de conciliar los artículos cuestionados para que el nombramiento de los jueces se dé tal como ocurre con el del ingeniero municipal: lo propone el alcalde y lo ratifica el Consejo Municipal.

Mediadores

El documento, que ha sido impulsado desde 2008 por la Alianza Ciudadana Pro Justicia, y que surgió a partir de la creación del Pacto de Estado por la Justicia, busca modernizar la justicia administrativa implementada por los corregidores y convertirla en justicia de paz.

A través de esta norma, por ejemplo, cada corregimiento tendrá su propia justicia comunitarias de paz.  

De acuerdo al proyecto de ley, su funcionamiento estará basado en los métodos de solución de conflictos, la equidad, la práctica de círculos de paz y la participación ciudadana.

El proyecto además crea la figura de los conciliadores y mediadores comunitarios, quienes intervendrían entre las partes antes de la actuación del juez. 

Pero, ¿qué es lo que busca esta propuesta legislativa? Según el ministro de Gobierno, Milton Henríquez, quien presentó el proyecto a la Asamblea Nacional, la iniciativa reemplazaría el actual sistema de justicia administrativa de policía que según manifestó tiene “serios vicios de arbitrariedad, injusticias, abusos de parte de los funcionarios y violación a las garantías fundamentales”.

Asegura que está demostrado que el sistema ordinario de justicia impartido por los tribunales está saturado; por tanto, la respuesta a dicha problemática no está en la judicialización de los conflictos. “Esto permitiría desahogar la administración de justicia”, manifestó el ministro.

El ministro Henríquez, quien dijo respetar la facultad de los diputados de legislar, abogó porque se mantenga la propuesta original.

Para el procurador de la Administración, Rigoberto González, otro de los que ha abogado por este proyecto, lo que se busca es que el juez de paz no responsa ni al representante de corregimiento, ni al alcalde.

“Lamentablemente hay diputados que todavía están restringidos a que todo tiene que ser manejado desde la óptica política. Pero la ciudadanía lo que quiere es contar con autoridades que tengan una independencia de la incidencia política”, precisó.

Competencias

De acuerdo con la propuesta legislativa, los jueces de paz tendrán una serie de competencias: atenderán y decidirán sobre riñas, tomarán decisiones ante quejas por posibles actos que atenten contra la moral, ruidos molestos, agresiones físicas cuya incapacidad sea menor de 30 días, y hasta apropiación mediante engaño de una suma no superior a los mil dólares, siempre que no esté tipificada como delito agravado por el Código Penal.

Para la convivencia pacífica en el corregimiento, podrá emitir órdenes de alejamiento, cauciones pecuniarias, boletas de protección, entre otros.

De igual manera tendrá la potestad de imponer sanciones hasta de mil dólares en proporción al daño causado, reparación del daño causado o indemnización y amonestación verbal, entre otros.

En cuanto a la aplicación de medidas provisionales, tendrá la potestad de ordenar medidas de aprehensión que no excedan las 48 horas. Luego de ese periodo, deberá remitir el caso a la autoridad competente.

El juez de paz además tendrá la faculta de intervenir en los casos de violencia doméstica. Por ejemplo, podrá ordenar al agresor el desalojo de la vivienda hasta por un mínimo de un mes prorrogables si lo solicita la parte ofendida, o si persisten las razones que motivaron la decisión.

La propuesta elimina la facultad que tienen actualmente los corregidores de ordenar, acompañar y realizar allanamientos. 

Si se aprueba el proyecto de ley, el juez de paz también tendrá la facultad de fijar pensión alimenticia provisional.

Diputado Barría, acusado de ‘sembrar’ pruebas

La denuncia por una agresión, (varios disparos) a la residencia del diputado Luis Barría parece tomar otro rumbo, luego de que un agente del Servicio de Protección Institucional (SPI), lo acusara de heberle ‘sembrado' drogas en su automóvil.

Se trata del exsargento segundo del SPI Francisco Medina Santamaría, quien hasta hace algunas semanas era parte del equipo de escoltas del diputado del panameñista por el circuito 8-9.

Barría denunció la semana pasada ante el pleno de la Asamblea Nacional, que contra su residencia en el corregimiento Ernesto Córdoba Campos, le habían hecho varios disparos, razón por la cual propuso ante el pleno legislativo la citación del ministro de Seguridad, Rodolfo Aguilera Franceschi.

INICIO DE LA TRAMA

Según se informó a La Estrella de Panamá , el exsargento del SPI, reveló el 6 de enero pasado que a su residencia en una barrio de La Chorrera, le habían hecho varios disparos, lo cual había sido denunciado ante la Policía Nacional por sus vecinos.

Según consta en el expediente, al cual tuvo acceso La Estrella de Panamá , producto de la denuncia, los agentes de la Policía, se presentaron a su residencia en La Chorrera. En la revisión identificaron que en efecto, el vehículo del agente tenía una orificio de bala, pero esto no fue lo único que encontraron. En el interior del automóvil, propiedad del exsargento se ubicaron 18 paquetes con polvo blanco, que producto de las pesquisas, se corroboró que se trataba de la droga conocida como cocaína.

Ante el hallazgo, Medina Santamaría del SPI, fue aprehendido y puesto a órdenes de la Fiscalía Delegada de Drogas de Panamá Oeste. El exsargento renunció al SPI el 7 de diciembre de 2015, según dijo en su indagatoria.

En su indagatoria ante la fiscalía, Medina Santamaría vinculó al diputado Barría, al mismo al que hasta hace unas semanas le correspondía custodiar.

También reveló que las diferencias con Barría surgieron, después que el diputado se percató de que él mantenía una relación sentimental con una mujer muy cercana al diputado.

El agente en su indagatoria ante la Fiscalía de Drogas de Panamá Oeste, dijo que estaba a cargo de la seguridad de Barría, desde el momento en que el diputado fungía como presidente de la Comisión de Credenciales y le correspondió ver en primera instancia la investigación del destituido magistrado de la Corte, Alejandro Moncada Luna.

LA RENUNCIA DEL SPI

Según reveló Medina Santamaría, en su indagatoria, Eric Estrada, director del SPI, estaba enterado de lo que sucedía por lo cual pretendía someterlo ante un tribunal de ética, pues no les está permitido como agente de la institución involucrarse sentimentalmente con el personal al que deben custodiar. Ante esta posibilidad, según consta en el expediente, Medina Santamaría presentó la reuncia al SPI.

EXPEDIENTE EN LA CORTE

Ante esta situación, la Fisaclía Delegada de Drogas de Panamá Oeste está por compulsar a la Corte autenticadas de las investigaciones en especial de la indagatoria de Medina Santamaría.

El proceso ante la Corte sería por supuesta la relación de delitos relacionados con drogas, por mandato del artículo 487 del Código Procesal Penal que dispone que en caso que una agencia del Ministerio Público tenga conocimiento de un proceso en el que se menciona a un diputado debe correr traslado a la Corte Suprema que por mandato de la Constitución Política de la República de Panamá es el ente que debe investigar cualquier denuncia contra los diputados.

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PRONUNCIAMIENTO

Palabras del presidente Juan Carlos Varela

La semana pasada durante un acto realizado en el oriente chiricano, el presidente de la República, Juan Carlos Varela, se pronunció sobre el caso del diputado, Luis Barría y su propuesta de citar al ministro de seguridad al pleno de la Asamblea para que rinda informe sobre la inseguridad que hay en el país.

Dijo ‘estos parecen problemas pesonales, más que problemas derivados por la seguridad en el país', pero no aclaró a qué se refería.

‘El diputado debe revisar bien y preguntarse a sí mismo, el por qué de los disparos a su residencia', añadió el mandatario, sin brindar más detalles a los medios.

Las palabras del presidente fueron más allá, ‘en Panamá hay 800 mil viviendas y no a todas les disparan, sin que exista alguna razón, habría que ver si ésto se trata de un mensaje', dijo el presidente.

Magistrado José Ayú Prado acumula siete casos

El presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), José Ayú Prado, tendrá que hacerle frente a otras siete denuncias que reposan en la comisión de Credenciales de la Asamblea Nacional, en las que se le acusa de la presunta comisión de delitos contra la administración pública, que incluyen abuso de autoridad, usurpación de funciones públicas, corrupción de servidores públicos, y peculado.

En los expedientes se pone en duda actuaciones de Ayú Prado cuando fue procurador de la Nación y en la Corte.

El exjuez Alexis Ballesteros, quien lo denunció por supuestamente haberlo presionado para que fallara a favor de allegados del expresidente Ricardo Martinelli, dice no “esperar nada” de la comisión de Credenciales. Asegura que diputados y magistrados tienen un “pacto” para protegerse mutuamente.

Mientras que Carlos Lee, de Alianza Ciudadana Pro Justicia, que lo denunció por peculado de uso por los gastos en viajes al extranjero y excesivos viáticos cobrados, indicó que la actitud de los diputados de no investigar, deja un mensaje “muy negativo” sobre el rol constitucional que tienen que cumplir.

Los siete expedientes en que se vincula al magistrado Ayú Prado

El magistrado presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), José Ayú Prado, deberá hacerle frente a una denuncia en su contra por supuesto abuso de autoridad cuando era jefe del Ministerio Público, cargo en el que fue nombrado por el expresidente Ricardo Martinelli.

El caso guarda relación con una denuncia interpuesta en 2014 por el sindicalista Mariano Mena, quien argumentó en el escrito que en 2011, en su rol de procurador, Ayú Prado destruyó documentos e información de la investigación en el caso de hackeo al correo electrónico del entonces ministro de la Presidencia, Demetrio Jimmy Papadimitriu.

Este es uno de los siete casos que reposan en la comisión de Credenciales de la Asamblea Nacional, instancia que esta semana desestimara ocho denuncias contra el jefe de la Corte, interpuestas por el juez Juan Domingo Ibarra.

Los diputados que votaron para archivar los casos [ocho votos a favor y uno en contra] alegaron que no tenían elementos de convicción que sustenten los  

hechos. La mayoría de las acusaciones que tiene el presidente de la CSJ en el Legislativo están relacionadas con abuso de autoridad  tres en total, usurpación de funciones públicas, corrupción de servidores públicos y peculado.

EXJUEZ BALLESTEROS

Otro de los expedientes al que le tendrá que hacer frente el magistrado, es el caso por la supuesta comisión de delito de abuso de autoridad. El documento llegó al Palacio Gil Ponce de la mano del exjuez Alexis Ballesteros, quien lo señala de haberlo presionado para que fallara a favor en pesquisas relacionadas con miembros del “círculo cero” de Martinelli.

Ballesteros denunció que había recibido presiones para fallar en tres casos: el de Transcaribe Trading, S.A. (TCT) de propiedad de los hermanos Ochy, allegados al exmandatario por el bloqueo a Corporación La Prensa, S.A.; el que se seguía a la perredista Balbina Herrera por divulgar correos de  

Martinelli en los que se hablaba de compras de equipos de seguridad, y otro que involucraba a un familiar de Gabriel Btesh, amigo personal del expresidente.

“Después de lo que ha ocurrido con otras denuncias, no puedo esperar más nada de la comisión de Credenciales. El proceso no ha avanzado, no sé si es que existe algún pacto con la Asamblea, pero mi expectativa sobre el resultado final de estas denuncias que presenté con pruebas, no es muy alta”, afirmó ayer Ballesteros.

Un tercer expediente contra este magistrado de la Corte, vincula además a sus colegas Harry Díaz, Jerónimo Mejía, Luis Ramón Fábrega, Abel Zamorano, y a los suplentes Secundino Mendieta, Giselle Ayala, Nelly Cedeño, e incluso abarca al exmagistrado Harley Mitchell.

El abogado Enrique Arrocha, en representación del ciudadano francés Jean Richard Charbit, los acusa de presuntamente cometer delitos en el ejercicio de sus funciones. Todo a raíz de una decisión de la Corte, luego de que el Servicio Nacional de Migración decidiera expulsar del país a Charbit por supuestos antecedentes penales en su país de origen.

Un cuarto expediente es por la supuesta comisión del delito de peculado de uso. Este surge luego de una denuncia de Alianza Ciudadana Pro Justicia en la que se incluyó también a De León y a Fábrega, por los viajes al extranjero y “los excesivos viáticos cobrados”.

Carlos Lee, de la Alianza Ciudadana Pro Justicia, argumenta que en los registros existentes sobre viajes y viáticos se revela que los magistrados estuvieron en dos países de manera simultánea, lo que agregó, genera “sospecha”.

Lee dice tener la esperanza de que los diputados darán un mensaje “claro”, de que hay voluntad para cumplir el mandato constitucional que tienen para investigar a los magistrados.

‘Intromisión’

Otros dos casos [quinto y sexto] están relacionados con una investigación solicitada por el propio Ayú Prado contra una red de corrupción que operaba en el Órgano Judicial, denominada “la taquilla”, y que según las investigaciones cobraba sumas de dinero a cambio de liberar a procesados en casos judiciales.

Una de las denuncias la presentó la jurista Celma Moncada, quien lo acusa de supuesta “intromisión” en asuntos del Ministerio Público.

Todo guarda relación con una carta que envió Ayú Prado al fiscal sexto Anticorrupción el pasado 4 de febrero, en la que le sugiere que limite los movimientos de los investigados en este caso, en los tribunales superiores o juzgados. “Siendo magistrado de la CSJ él no puede ordenar como le ordenó al fiscal sexto”, agregó Moncada.

La otra denuncia la interpuso el abogado Rosendo Rivera, quien asegura que Ayú Prado cometió hechos dolosos en el caso “la taquilla”, luego de que en una nota remitida a la Fiscalía Auxiliar, a cargo de Marcelino Aguilar, sugirió como enlace a Ameth Cáceres Muñoz para una diligencia judicial relacionada con el caso.

Cáceres, según el denunciante, laboró en el pasado con Ayú Prado.

Revelaciones

El más reciente caso fue presentado por Luis Alfonso Romero Chatrú, quien, además, incluyó a Harry Díaz. Los acusa de supuestamente haber incurrido en faltas a los deberes de los servidores públicos.

La denuncia está sustentada en una entrevista que dio Díaz, en la que confirmó la existencia de bandos políticos en la Corte, habló de corrupción y dejó en evidencia la intromisión del Ejecutivo en el Judicial durante la era Martinelli.

¿Tienen futuro estos expedientes? El presidente de la comisión de Credenciales, el panameñista Jorge Iván Arrocha, aseguró que analizarán y tramitarán cada uno de esos casos. “Hay un compromiso de los diputados.

De haber un elemento que relacione los hechos denunciados con el magistrado Ayú Prado se hará una investigación”, prometió.

Explicó que repartirán copia de cada uno de los expedientes a los diputados que integran la comisión para que se asesoren con sus abogados y luego tomar una decisión

Faltan $30 millones para SPA, De León

El Órgano Judicial necesita $30 millones para montar la plataforma del sistema penal acusatorio, de 945 funcionarios, en el Primer Distrito Judicial de Panamá (Colón, Panamá Oeste, Darién, Guna Yala y Panamá) antes del 2 de septiembre próximo.

"La Corte ha exigido al Ejecutivo que acelere el pago, y si no es posible, que busque un crédito extraordinario", comentó el vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia, el magistrado Hernán de León, al ser abordado por La Estrella de Panamá , durante la presentación del libro Mediación y Conciliación en el Sistema Penal Acusatorio , obra del magistrado Samir Tejeira Arcia, del Tribunal Superior de Apelaciones del Segundo Distrito Judicial de Coclé y Veraguas.

Según el magistrado de León, la situación fue planteada por los magistrados de la Corte durante una reunión de alto nivel en la que participaron el ministro de la Presidencia, Álvaro Alemán, y representantes del Ministerio de Economía y Finanzas y del Instituto de Medicina Legal.

‘La justicia cuesta. Si se quiere calidad o excelencia, se requiere de ese presupuesto', dijo el magistrado.

LA CRISIS EN EL GIL PONCE

En cuanto al ambiente de crisis que rodea desde hace unos meses al máximo Órgano de justicia del país, señaló que ‘no se puede tapar el sol con la mano. Hayuna situación dificil, pero esta se origina básicamente en problemas interpersonales de algunos magistrados', comentó.

MOMENTO MEDIÁTICO

El vicepresidente de la Corte considera que el momento de inmediatez ‘mediática' que vivimos, y ante la extrema facilidad para difundir hechos, opiníones e ideas, el ‘comportamiento del juez debe ser prístino' en todo momento

"Nuestra obligación es mantener la transparencia en todas nuestras actividades', reiteró de León, dejando entrever que "lastimosamente existen ‘agendas ocultas" que desmeritan el trabajo arduo que vienen realizando muchos de los servidores judiciales

‘Yo he tratado de mediar entre algunos colegas con diferencias pero es bastante difícil', según reveló.

No obstante, el magistrado De León considera que cada despacho o unidad en la corte tiene independencia judicial y que un magistrado no puede interferir en las labores de otros magistrados, a pese a ser un órgano colegiado.

Juez admite apelaciones en el caso radares; el expediente pasa ahora al Segundo Tribunal Superior

El juez quinto Penal, Enrique Paniza, admitió las tres apelaciones que presentó la Fiscalía Tercera Anticorrupción, dentro de la investigación por la compra de 19 radares a la empresa italiana Selex por $125 millones.

El pasado lunes, la fiscal Zuleyka Moore sustentó sus apelaciones contra las decisiones del juez Paniza de decretar la nulidad parcial del expediente y cambiar las medidas cautelares de detención preventiva a José Raúl Mulino y Alejandro Garuz, ministro y viceministro de Seguridad Pública, respectivamente, en el gobierno de Ricardo Martinelli  (2009-2014).

Paniza ordenó la nulidad relativa del expediente por considerar que Moore realizó diligencias judiciales fuera de la fecha permitida para concluir la instrucción sumarial.

El juez ahora deberá enviar el expediente al Segundo Tribunal Superior de Justicia, que debe resolver los recursos presentados por Moore.

El Segundo Tribunal Superior está integrado por los magistrados Secundino Mendieta, María de Lourdes Estrada, Wilfredo Sáenz, Luis Mario Carrasco y Adolfo Mejía.

La apelación de Moore suspende de momento la puesta en libertad de Mulino, quien se encuentra detenido provisionalmente en la sede de la Policía Nacional, desde el 26 de octubre pasado. Paniza le otorgó la medida cautelar de impedimento de salida del país y la obligación de notificarse cada 30 días. En tanto Garuz en abril será enjuiciado por la interceptación de comunicaciones desde el Consejo de Seguridad Nacional– fue favorecido con detención domiciliaria.

Presentan acción de habeas corpus a favor de Martinelli

La Corte Suprema de Justicia aceptó una solicitud de habeas corpus a favor del ex presidente y diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen) Ricardo Martinelli, por el caso de espionaje telefónico por el que se le investiga y por el que se le ha declarado en rebeldía, tras negarse a declarar ante los tribunales.

La petición ha quedado en manos del magistrado Abel Zamorano, quien comunicó al fiscal de la causa, el magisstrado Harry Díaz, que tendrá que esperar la resolución a favor en o en contra de la acción requerida por los abogados antes de adelantar cualquier otro protocolo de ley.

La defensa de Martinelli sostiene que es ‘ilegal' la detención provisional que pesa en contra de su representado y que se comunicó formalmente el pasado viernes.

El exmandatario es procesado en la Corte Suprema de Justicia por supuestas interceptaciones de comunicaciones a cientos de personas a través del Consejo de Seguridad Nacional.

Carlos Carrillo, quien presentó el recurso como parte del equipo de abogados del ex presidente, sustentó que los oficios girados por el magistrado Jerónimo Mejía a los directores de la Policía Nacional (PN), la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), la Dirección Nacional de Aduanas (DNA), el Servicio Nacional Aeronaval (Senan), la Dirección General de Servicio Nacional de Migración y Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), carecen de una adecuada motivación.

‘Los oficios emitidos a los distintos estamentos de seguridad para darle cumplimiento a la resolución de 21 de diciembre de 2015, emitida por el juez de garantías, son contrarios a derecho y la voluntad de nuestra máxima corporación de justicia, porque en los mismos se señala que existe una acusación en contra de nuestro demandante, cuando el mismo no ostenta la condición de imputado, ni de acusado dentro de la referida carpetilla penal', alega el jurista en el recurso legal.

Se explica en el documento que ‘es falso' el contexto señalado por el magistrado Mejía en los oficios girados hacia los estamentos de seguridad, en los cuales se les indica a tales organismos que ‘al momento de la detención debe comunicársele al señor Ricardo Martinelli Berrocal que el Pleno de la Corte Suprema de Justicia ordenó su detención provisional dentro del proceso penal que se adelanta'.

También debe informársele que existe una acusación presentada en su contra por el magistrado fiscal.

De acuerdo al jurista, las órdenes de detención provisional impugnadas vulneran el artículo 22 de la Constitución Política, que entre otras cosas, señala: ‘toda persona detenida debe ser informada inmediatamente y en forma que le sea compresible, de las razones de su detención y de sus derechos constitucionales y legales correspondientes (…)'.

Por consiguiente, agrega, contrario al espíritu del mandato constitucional, el magistrado Mejía ‘señaló las órdenes de detención provisional la existencia de un proceso penal en su contra consecuencia de la acusación presentada por el magistrado fiscal (Harry Díaz) en contra de Ricardo Martinelli, desconociendo la realidad procesal'.

La acción legal recoge las actuaciones del magistrado Mejía y los fundamentos por las que se a nulan, como faltar lo que contraviene las disposiciones de la Convención Americana de Derechos Humanos y la Ley 63 de 28 de agosto de 2008, mediante la cual se adopta el Código Procesal Penal, donde se establece que ‘sin formulación de cargos no habrá juicio ni habrá pena sin acusación probada'.

Siete expedientes comprometen aún a José Ayú Prado

Las noches de pesadilla para el magistrado José Ayú Prado aún no acaban. Aunque este miércoles, de un solo golpe, se libró de un juicio público con el archivo de ocho denuncias del juez Juan Antonio Ibarra, el presidente de la Corte Suprema de Justicia mantiene pendientes otros siete casos, de distintos querellantes, que no han sido analizadas.

Entre los delitos que se le achacan, abuso de autoridad, contra la administración pública, corrupción de servidores públicos, usurpación de funciones y otros actos violtarios a la Constitución y diversas leyes.

Para su suerte, el presidente de la Comisión de Credenciales de la Asamblea Nacional, el panameñista Jorge Iván Arrocha, no ha definido todavía una fecha cercana para ventilar la admisión o no de los procesos.

Los procesos entraron entre febrero de 2014 y marzo de este año, pero se han quedado ‘congelados'.

CASO 'LA TAQUILLA'

Entre los casos contra Ayú Prado está la querella penal, interpuesta por la abogada Celma Moncada, por la comisión del delito de abuso de autoridad al entrometerse en asuntos que corresponden al Ministerio Público.

La denuncia fue presentada el 25 de febrero de 2016 ante la Secretaría General de la Asamblea. En la Comisión de Credenciales es el expediente 217, que ingresó a su análisis el 1 de marzo.

El tema está vinculado con la presunta red de corrupción detectada en el Órgano Judicial denominada, que fue desmantelada en noviembre del año pasado, dando con la aprehensión de 10 funcionarios y particulares.

Según Moncada, Ayú Prado, en calidad de presidente de la Corte, envió una nota el 4 de febrero al fiscal sexto Anticorrupción, Aurelio Vásquez, para ‘ordenarle' que no permitiera a ninguno de los investigados recurrir a tribunales superiores o juzgados, lo que coartaba el derecho a su defensa.

El punto es que como magistrado no puede ordenar al fiscal, porque son dos jurisdicciones separadas.

Moncada dijo a La Estrella de Panamá que en su denuncia sí están incorporadas las dos pruebas de las actuaciones de Ayú Prado y no hay manera de que sea archivada por los diputados. Adjuntó la carta de respuesta del fiscal al magistrado.

‘En el documento aparece la firma del magistrado con sello; él no va negar que es su firma', adujo la abogada.

CASO ‘HACKEO'

Dos años en manos de los diputados tiene ya la denuncia penal interpuesta por el sindicalista Mariano Mena, exsecretario general de la Central General de Trabajadores de Panamá, quien acusó a Ayú Prado por los delitos de abuso de autoridad y contra la fe pública en perjuicio de la administración pública, tras haber ordenado la destrucción de documentos e información de direcciones electrónicas relacionadas con el expresidente Ricardo Martinelli y el exministro Demetrio Papadimitriu.

La denuncia fue presentada a finales de 2012. En la Comisión de Credenciales es el expediente 169, que ingresó el 19 de febrero de 2014.

El 23 de agosto de 2011, Ayú Prado, en su calidad de procurador general de la Nación, había enviado una solicitud a la Sala Penal de la Corte para que autorizara la destrucción de información que había sido clasificada como de ‘acceso restringido'.

La Sala Penal emitió el 7 de septiembre de 2011 una resolución rechazando de plano la solicitud.

Y aunque Ayú Prado se notificó de la decisión de esa instancia, dos días después, el 9 de septiembre, a las 9:30 de la mañana, ese mismo día, emitió una providencia mediante la cual disponía de la destrucción del material.

Mena, en marzo del año pasado, pidió públicamente celeridad para atender la denuncia, pese a que dudó del trámite legislativo por el sistema de ‘encubrimiento' entre magistrados y diputados.

Sobre ese caso, la diputada Zulay Rodríguez entregó un informe el 27 de enero de este año en el que pide juicio público contra el presidente de la Corte, pero la Comisión no ha deliberado ese punto.

El dirigente afirmó ayer que presentaron todas las pruebas y sería ‘frustrante' que la Asamblea desestimara la denuncia.

‘Aportamos la documentación que lo demuestra… Ayú Prado destruyó las pruebas días después de haberse notificado', remarcó Mena.

CASO VIAJES

Otro caso compliado es la denuncia penal, presentada el 27 de enero de 2015, por la Alianza Ciudadana Pro Justicia, contra Ayú Prado, sus colegas Luis Ramón Fábrega y Hernán De León, por delitos contra la administración pública, en la modalidad de diferentes formas de peculado, referente a irregularidades en viajes y viáticos cobrados por los magistrados en una misma fecha en lugares diferentes.

En la Comisión de Credenciales es la denuncia 214, que ingresó al análisis el mismo día de su presentación.

El informe de la Secretaría de la Corte, adjuntado como prueba autenticada y notariada, destaca que Ayú Prado viajó a México del 17 al 19 de junio de 2015 y curiosamente estuvo en Costa Rica del 18 al 20 del mismo mes.

Según Carlos Lee, uno de los abogados denunciantes, adjuntaron cinco pruebas de los documentos oficiales. ‘Por lo menos no podrán desestimar la denuncia por falta de pruebas', estimó.

En las ocho denuncias del juez Ibarra, los diputados alegaron la inexistencia de ‘elementos de convicción' para sustentar los hechos.

El periodo de Ayú Prado inició el 2 de enero de 2013 y termina en diciembre de 2023.

Asamblea suspende consultas

Las consultas a las reformas de las contrataciones pública culminarán la próxima semana, según un comunicado de la Asamblea Nacional.

Este jueves se realizó la segunda ronda de consultas y se cerró la lista de las personas que emitirán sus consideraciones al proyecto de ley, que fue presentado por el Ejecutivo y unificado con una propuesta que había presentado la diputada independiente Ana Matilde Gómez.

Hasta el momento, unas 20 personas han planteado sus puntos de vista.

El diputado Miguel Salas, presidente de la Comisión de Economía y Finanzas de la Asamblea Nacional, dijo que se busca consenso entre los diferentes sectores para que el proyecto sea un documento exitoso.

El diputado Gabriel Soto, quien presidió la segunda reunión de consultas de este jueves, dijo que el próximo martes 22 de marzo se concluirá con las evaluaciones de los diferentes sectores. A su juicio, hay muchas coincidencias en los aspectos que se deben fortalecer..

La propuesta del Ejecutivo elimina las licitaciones abreviadas y las compras de la Dirección de Asistencia Social (DAS), antiguo Programa de Ayuda Nacional (PAN), estarán sujetas a la ley de Contratación Pública.

TI recurrirá a la Cancillería para expulsión de Martinelli del Parlacen

Así lo sugirió este jueves el presidente de Transparencia Internacional (TI)José Ugaz, un día después de que la oenegé solicitó al Parlacen revocar la membresía al exmandatario para que pueda hacerle frente a los casos en Panamá ante las fiscalías anticorrupción. “Se nos ha informado de que este pedido tendría más fuerza si fuera corroborado por la Cancillería panameña (…). Vamos a hacerle saber sobre esta situación a la Cancillería para que tome la decisión (…)”, dijo.

 

'PANAMÁ DEBE PEDIR EXPULSIÓN

José Ugaz, presidente de Transparencia Internacional (TI), manifestó que hasta la fecha no han recibido una respuesta de parte del Parlamento Centroamericano (Parlacen) sobre la carta abierta en la que la oenegé le pidió a ese foro regional que revoque la membresía al expresidente Ricardo Martinelli, para que le haga frente a la justicia ordinaria en Panamá. 

Ugaz explicó que se les ha informado oficiosamente que este pedido “tendría mucha más fuerza si fuera corroborado por la Cancillería panameña”; es decir, dijo, “si el Gobierno de Panamá requiriera al Parlacen que le cancele la membresía a Martinelli”. 

“Vamos a hacerles saber esta situación a la Cancillería [de Panamá], para que tome la decisión que corresponda. Creemos que siendo una persona que está sujeta a investigaciones por imputaciones graves, el Gobierno de Panamá debería, efectivamente, pedirle al Parlacen que lo expulse de ese foro, a fin de que no cuente con los privilegios que le asigna el cargo de parlamentario centroamericano”, dijo el que fuera procurador ad hoc en casos de corrupción de alto perfil en Perú, en entrevista telefónica con este medio.

EN GUATEMALA

La Prensa también llamó al Parlacen en Guatemala, para que explicara cuál es el proceso para sacar a un miembro del foro. Fernando Calviño, jefe del departamento de Comunicación de ese organismo, manifestó que el presidente del Parlacen, José Antonio Alvarado, dejó claro en un comunicado cuáles son los pasos a seguir.

Precisó, en ese sentido, que todo comienza “con una petición formal y contundente”, la cual se haría por vías diplomáticas, según lo establece el Tratado Constitutivo del foro regional.

En efecto, el artículo 22 del Tratado Constitutivo del organismo establece en uno de sus apartes que el Parlacen, “a solicitud de las autoridades competentes del país del cual es diputado nacional, podrá levantar y suspender las inmunidades y privilegios de sus diputados”.

En ese comunicado, Alvarado también informó que, como presidente del organismo, ha preparado una serie de reformas para ser presentadas en la reunión de jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de Integración Centroamericana, entre las que se incluyen “que ningún diputado tenga más inmunidad que aquella derivada de sus declaraciones y opiniones en el ejercicio de su cargo”.

“En diferentes pronunciamientos, el Parlacen ha manifestado su firme apoyo en el combate a la corrupción y en la promoción de la transparencia en las gestiones públicas locales y regionales”, advirtió.

Las sesiones del Parlacen correspondientes al mes de marzo culminaron el pasado miércoles 16.

Martinelli solo ha asistido a dos sesiones en el foro: en septiembre de 2014 y enero de 2015. El 29 de enero de 2015, un día después de que saliera de Panamá, supuestamente a contarle al mundo sobre la persecución política de la que era objeto en el país, se presentó en el foro en Guatemala. En el periodo de incidencias de esa asamblea, el hombre que un día tildó al Parlacen “de cueva de ladrones” se desahogó. “Temo por mi vida y mi familia. Soy un perseguido político. Varela hará lo imposible para acabar con mi partido y mi persona, inventando causales y procesos”, contó.

El exmandatario panameño solo ha asistido a dos reuniones en el foro centroamericano: en septiembre de 2014 y en enero de 2015.

 

En Panamá, mientras tanto, se iniciaba una de sus causas en la Corte Suprema de Justicia, tribunal que le juzga por su condición de diputado. El pleno de la Corte admitió el 28 de enero de 2015 el conocimiento de una causa penal por la supuesta comisión de delitos contra la administración pública, a raíz de la compra de comida deshidratada a través del extinto Programa de Ayuda Nacional, por 44.9 millones de dólares.

Giacomo Tamburrelli, exdirector del PAN, declaró ante la Fiscalía Segunda Anticorrupción que el exmandatario le ordenó aprobar la compra de alimentos deshidratados. El diputado del Parlacen no volvió al país, y a partir de esa fecha la Corte panameña ha puesto en marcha al menos 12 investigaciones en las que se le señala por supuestas anomalías durante su mandato.

LA CAUSA

Ugaz también dijo que la petición al Parlacen surgió a raíz de la necesidad de que “sea juzgado por los fiscales y jueces anticorrupción, como cualquier otro ciudadano”, ya que, agregó, el máximo tribunal de Panamá –la Corte Suprema de Justicia– ha dilatado los procesos del exmandatario.

 

ñadió, que esta campaña responde a una iniciativa global contra la impunidad, y parte de la misma se ha establecido a través de las redes sociales. “Lo que queremos es que quienes están bajo sospecha de haber incurrido en graves actos de corrupción, más aun si han tenido niveles de poder en los países, rindan cuentas de sus actividades y si se les encuentra responsables, que no queden en la impunidad, sino que paguen por los delitos en los que han incurrido”, sostuvo el exprocurador peruano.

LA CARTA

El presidente de TI también se refirió a la carta que Martinelli envió el 1 de marzo a la sede de la organización en Berlín, en la que cuestionó su inclusión en la campaña Desenmascara al Corrupto.

“En la carta, él simplemente dice que está en la situación en que se encuentra debido a una mala campaña que le hace la prensa controlada por sus enemigos, y que nosotros estamos mal informados. En ese sentido, nosotros vamos a responderle esa comunicación, pidiéndole que nos dé su versión sobre los hechos y las investigaciones, las que evaluaremos para un pronunciamiento futuro”, dijo.

En la nota del pasado 1 de marzo, Martinelli dice, entre otras cosas: “En las 26 referencias que apoyan el caso que hacen en mi contra, en el resumen, 11, o más del 40%, provienen solamente de dos fuentes panameñas: el periódico La Prensa y Televisora Nacional TVN. Estos dos medios parecen haber dado la primicia de mis supuestos malos actos en la gran mayoría de las instancias. Las fuentes restantes en su referencia, simplemente se apoyan en acusaciones sin prueba o motivaciones políticas sistemáticamente fabricadas por estos dos medios de comunicación (…). Los dos medios en cuestión están controlados por mis más férreos y públicamente declarados enemigos personales, que en estos momentos apoyan fuertemente a la administración actual”.

Ramón Ricardo Arias, presidente de TI, capítulo Panamá, también reaccionó a la misiva. Manifestó que lo que más le sorprende de la carta es que no se refiere a ningún elemento de exculpación, sino que más bien trata de insinuar que personas que trabajan en el actual gobierno tienen vinculación en los actos en los que a él se le menciona.

“No vi en esa carta ningún intento de esclarecer o dar detalle de cosas que de alguna manera pudieran llevar a las personas y a la prensa internacional a determinar que Martinelli es inocente. Creo que sería una buena oportunidad que el señor Martinelli trate de aclarar sus actuaciones como presidente”, agregó.

Este medio también le consultó a la Cancillería si el Gobierno estaría dispuesto a hacer la petición al Parlacen, como sugiere Ugaz, y a través de la Dirección de Información y Relaciones Públicas de la entidad se comunicó que la Dirección Jurídica — de la entidad— “está examinando cuál es el proceso que se seguiría, según lo que estipule la ley”.

 

 

 

 

‘Habeas corpus’ a favor de Ricardo Martinelli

18 mar 2016 – 00:05h

La defensa del expresidente Ricardo Martinelli busca dejar sin efecto la orden de detención provisional del exmandatario, girada por el magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) Jerónimo Mejía el 11 de este mes.

Carlos Carrillo, del equipo de abogados del también diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen), informó ayer que presentó un recurso de habeas Corpus ante la CSJ, luego de que Mejía, juez de garantías en el proceso que le sigue ese tribunal a Martinelli por los pinchazos, girara oficios a los directores de la Policía Nacional, Dirección de Investigación Judicial, Dirección Nacional de Aduanas, Servicio Nacional Aeronaval, Dirección General del Servicio Nacional de Migración y del Servicio Nacional de Fronteras, en los que les pidió, además, que a Martinelli se le debe comunicar cuáles son los delitos que se le endilgan: contra la inviolabilidad del secreto y el derecho a la intimidad, y peculado.

Carrillo explicó que la orden de detención provisional a Martinelli, gestionada por Mejía, “no tiene fundamento” y es “ilegal”, porque, a su juicio, no fue lo que ordenó el pleno de la Corte.

También resaltó que el director de la Policía Nacional, Omar Pinzón, violó el principio de reserva. “El director dio declaraciones públicas sobre cuestiones públicas que son de reserva y que él no podía ni confirmar ni referirse a las mismas”, sostuvo el abogado.Hasta el momento, solo se conoce de las órdenes que giró Mejía a las autoridades de seguridad.

En la Cancillería reiteraron ayer que no han recibido ninguna solicitud del magistrado de la Corte para tramitar la extradición del exmandatario. La educadora Yadira Pino, una de las víctimas del espionaje supuestamente cometido por Martinelli, dijo: “el magistrado es ambivalente, zigzagueante, es temeroso y toma decisiones muy cosméticas, como para que no se diga que no se está haciendo nada, la ley establece los mecanismos y los pasos para tomar una decisión”.

Agregó que “el magistrado ha demorado esto, ha dilatado la situación y no se han ejecutado las órdenes que debieron haberse ejecutado en el tiempo correspondiente”. En tanto, el político Olimpo Sáez, otra de las víctimas, manifestó: “sospecho que van alargar este proceso, posiblemente, hasta la próxima campaña.

Dificulto que verdaderamente la Corte Suprema de Justicia tenga la intención de traer a Martinelli. Intuyó que no lo van a traer, porque hay que considerar que la mayoría de los magistrados, empezando por [José] Ayú Prado, fueron protegidos de Martinelli”.