El derecho a escoger

Muchos creen que la esclavitud fue cosa del pasado, pero resulta que actualmente en el mundo puede haber casi 30 millones de esclavos.

A la esclavitud contemporánea se le conoce como “una industria multimillardaria”, con estimados de generación de 35 mil millones de dólares anuales, y con China e India siendo los sitios que lideran en ello. Sin embargo, hasta en países como Inglaterra se calcula que hay cerca de 10 mil esclavos.

En Panamá he escuchado anécdotas de empleadas a las que encierran en las casas, por años y sin paga. Y a todo esto no olvidemos el horroroso problema de la prostitución forzada. Pero, al final de cuentas, lo que debemos tener presente es que la esclavitud estáíntimamente asociada a la pobreza y a la ignorancia. No podemos ser libres cuando no entendemos de libertad. Por eso, no hay peor esclavo que aquel que solito se coloca los grilletes.

La esclavitud mengua en proporción directa al estado de derecho, la libertad económica y el respeto por las libertades fundamentales de todos. La pregunta que destila de todo ello sería: ¿Cómo caemos, los humanos, en las ciénagas de la pobreza y la esclavitud?

Hay muchos senderos hacia la pobreza. Algunos producto de una disfuncionalidad cultural que a su vez es resultado de los malos andares que tienen esas consecuencias. Pero, tampoco podemos desentendernos de otra realidad más dramática y endémica del mundo, se trata de aquellas personas que en cierto sentido escogen ser pobres porque detestan el trabajo.

Frente a estos fenómenos, surgen las reclamaciones de justicia social y la necesidad de que “alguien” debe resolver el problema. La falacia en ello está en que si separamos el dolor de las consecuencias del mal andar, jamás podremos enderezar los caminos. Y es que para estar bien hay que andar bien. He allí el gran reto.

En resumen, hay muchas formas de ver y encarar estos problemas, pero en un escrito de opinión no queda más que usar algún buen ejemplo y el que se me viene a la mente es el “derecho a escoger”, tal como el derecho que tienen los padres a escoger dónde y cómo estudian sus hijos.

Es iluso pensar que nuestros hijos puedan emigrar desde la pobreza, si para ello le delegamos al Estado lo fundamental; vale decir, su educación, y más aún, dónde y cómo se educan.

A los que están esclavizados en el inframundo de la dominación politiquera es abominable hablarles de dar a los padres el derecho a escoger, porque ello equivale a perder el control político. A estos esclavistas modernos les escuchamos decir que “el pueblo”–en un sentido peyorativo de “populacho”– no tiene la capacidad de escoger y hay que hacerlo por ellos. Contarle a estos insensatos acerca de estudios y experiencias formidables de éxito, cuando se respeta el derecho a escoger es por gusto, pues valoran más sus intestinos que sus cerebros.

Una población de ciudadanos que requiere un funcionariado de niñeras que les digan dónde deben educar a sus hijos; en donde ir a buscar salud, etcétera, no tendrá otro destino que sufrir las consecuencias de semejante mal andar.

Los programas típicos de vales o cuentas de ahorro, con tarjetas de débito para aquellos ciudadanos que lo requieran, reducen los costos de la educación en más del 50%, al tiempo que mejoran de manera sustancial la educación. Pero mejor aún es que con ello viene aparejado aquello que manda nuestra Constitución, en su artículo 17 al decir que: “Las autoridades de la República están instituidas para proteger en su vida, honra y bienes a los nacionales…”.

¿Cómo proteger la honra de un pueblo al que se le conduce como semoviente? “Honra” se refiere al respeto y admiración, al valor de la persona humana como regente de su vida, la que jamás podrá navegar a buen puerto si cede el timón a los burócratas. ¡Digamos sí al derecho a escoger!

Panamá La Vieja, Nación E Hispanoamericanismo

A medida que se aproxima la conmemoración del V centenario de fundación de Panamá La Vieja, en 2019, se anuncian planes (La Estrella de Panamá, 9/8/2015) para festejarla. Hace cien años, el IV centenario de fundación de la ciudad, no pasó inadvertido. Para entonces, una élite político cultural creaba un calendario cívico que seleccionó el pasado que los panameños debían recordar como parte de su identidad nacional. En 1919, tras limpiarse el monte que cubría el interior de las ruinas de la vetusta ciudad, esta se convirtió en ‘reservorio del alma nacional'. Un ‘lugar de memoria' de los panameños.

El decreto municipal capitalino N° 35 declaró día de fiesta al 15 de agosto de 1919. Un programa conmemorativo recordó al público la trayectoria histórica de la primera ciudad de Panamá. Un desfile de carros alegóricos representó su fundación y destrucción tras el ataque pirata, asimismo, una alegoría evocó a Panamá La Moderna. Al público se obsequió La Leyenda del Pacífico, del poeta Ricardo Miró y el folleto Panamá La Vieja, de Juan B. Sosa. Sobre este escrito La Estrella de Panamá (16/8/1919) publicó el comentario siguiente: ‘Es de tanta importancia esta obrita que no solo es meritoria por su valor intrínseco, sino por la demostración que hace del acendrado patriotismo de su autor al rendirle homenaje a la patria con la narración de su historia'.

La conmemoración del IV centenario de Fundación de la primera ciudad de Panamá, en 1919, constituyó una fecha clave del pasado. El relato ubicó el nacimiento de Panamá en la conquista. La élite político cultural que se encargó de la afanosa tarea de creación de la identidad común de los panameños compartió el hispanoamericanismo como visión de nación. Este tuvo su apogeo en Hispanoamérica después de la Guerra anglo hispana de 1898 y consistió en forjar los lazos espirituales entre España y sus antiguas colonias.

El inmigrante español Gervasio García, escribió un ‘inventario' sobre la hispanidad en Panamá, para ‘rememorar el espíritu español que existía en todas las esferas intelectuales, sociales y políticas de Panamá hasta 1935 o 1940'. Ese comentario de un testigo de la época expresa cómo el hispanoamericanismo apoyó en el proceso de definición de lo nacional en las primeras décadas del siglo XX, ocupando Panamá La Vieja relevancia en esa narrativa histórica.

De sitio olvidado por mucho tiempo, la primera ciudad fundada en el siglo XVI, contribuyó a trazar el mapa de la tierra natal consagrado en la actualidad como patrimonio histórico. Espacio para el turismo y los hallazgos arqueológicos. Resulta testigo de múltiples eventos. En 1926, recibió la visita de los representantes extranjeros que conmemoraron el I centenario del Congreso Anfictiónico y, recientemente, de los mandatarios que asistieron a la Cumbre de las Américas.

En 2019, la conmemoración del V centenario de fundación de Panamá La Vieja, será un momento oportuno de reflexión sobre la ciudad, su historia y desafíos, especialmente, sociales y ambientales. También culturales.

 

Las medidas cautelares personales

Conforme a la Ley, nadie puede ser sometido a medidas cautelares, si no existen graves indicios de responsabilidad en su contra.

Serán aplicables las medidas cautelares, conforme al Código Judicial, en términos generales:

A. Cuando existan exigencias inaplazables relativas a las investigaciones, relacionadas con situaciones concretas de peligro para la adquisición o la autenticidad de las pruebas;

B. Cuando el imputado se dé a la fuga o exista peligro evidente de que intenta hacerlo;

C. Cuando, por circunstancias especiales o por la personalidad del imputado, exista peligro concreto de que éste cometa delitos graves mediante el uso de armas u otros medios de violencia personal.

¿Cuándo se puede decretar la detención preventiva en la cárcel?

La detención preventiva en establecimientos carcelarios, solo podrá decretarse cuando todas las otras medidas cautelares resultaren inadecuadas.

Salvo que existan exigencias cautelares de excepcional relevancia, no se decretará la detención preventiva cuando la persona imputada sea mujer embarazada o que amamante a su prole, o sea una persona que se encuentre en grave estado de salud, o una persona con discapacidad y un grado de vulnerabilidad, o que haya cumplido los sesenta y cinco años de edad. (Artículo 2129 del Código Judicial).

El problema de las medidas cautelares es que cada funcionario de instrucción, a su prudente arbitrio, las impone a veces de manera hasta desproporcionada y sin honrar la uniformidad en muchos casos. No todo indagado, merece la cárcel preventiva.

¿Para qué delito se pudiera decretar?

Código Judicial

Artículo 2140.

Cuando se proceda por delito que tenga señalada pena mínima de cuatro años de prisión y esté acreditado el delito y la vinculación del imputado, a través de un medio probatorio que produzca certeza jurídica de ese acto y exista, además, posibilidad de fuga, desatención al proceso, peligro de destrucción de pruebas, o que pueda atentar contra la vida o salud de otra persona o contra sí mismo, se decretará su detención preventiva.

Al Final … Todos Somos Iguales:

 “La soberbia es una discapacidad que suele afectar a pobres infelices mortales, que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder”, José de San Martín.

A pesar que durante los últimos años, la integración activa de las personas con discapacidad a la sociedad se ha constituido como una de las mayores preocupaciones que hay en el mundo, en Panamá ellos carecen de las oportunidades que tiene la población en general.

Actualmente 650 millones de personas con discapacidad –alrededor del 10% de la población mundial– carecen de las oportunidades y beneficios que tiene la población en general.

Mientras nos cuestionamos por qué hay un alto porcentaje de discriminación o rechazo contra el ciudadano que vive con alguna discapacidad, muchos de ellos se preguntan exactamente lo mismo. Por ello, quisimos escuchar a Anita Correa, quien al ser una joven, como nosotros, se ha esforzado por tener las mismas oportunidades al demostrar su emprendimiento profesional en la radio. “Búscame por ser buena en lo que hago, no por lástima”, así comentó la estudiante de comunicación social, quien –muy feliz– manifestó que ella, como muchos, no quisiera ser llamada “especial”, sino recordada como una persona con “diferentes cualidades”.

Según un estudio publicado por las Naciones Unidas, los discapacitados sufren tasas más altas de desempleo que el resto de la población en casi todos los países, aunque tienen todo el potencial profesional, la gama de conocimientos, habilidades y talentos. Además, el rendimiento en el trabajo de las personas con discapacidad es igual, si no mayor. Por esto, como país subdesarrollado que somos, no nos alejamos de la realidad mundial al tener uno de los mayores desafíos por cumplir: la educación ciudadana. Es necesario que los padres de esta generación instruyan, desde temprana edad, a sus niños a compartir con todos sus compañeros de escuela, aunque estén en una silla de rueda o hablen diferente a ellos. “La educación comienza en el hogar, y el ambiente donde te desenvuelves, comienza por nosotros mismos”, añadió Ana. Nuestro entorno puede influir significativamente, por eso, los niños pueden desarrollar complejos e inseguridades que, a largo plazo, se convierten en barreras para su superación e independencia.

Así mismo, la construcción de las obras e infraestructuras en el país, al no ser prioridad ni suficiente interés para el Gobierno, son un obstáculo para las mil 200 personas que tienen condiciones motoras reducidas. Muchos ciudadanos hacen un llamado de atención, porque ni el transporte ni las calles tienen las medidas correctas para el uso cómodo de todos los usuarios. “Si el Metro funcionara, yo no estuviera en casa; el elevador es oscuro y nadie –el personal– está pendiente”, añadió Anita.

Según la Secretaría Nacional de Discapacidad, hay un total de mil 473 personas con los diferentes casos de discapacidades, entre ellas: intelectual, auditiva, visual, física, psiquiátrica, múltiples y órganos y sistemas.

Por su parte, el Banco Mundial llegó a la conclusión de que el costo es mínimo cuando estos elementos se incorporan en el momento de la construcción; quiere decir que se ha demostrado que para hacer accesibles los servicios básicos basta con añadir menos del 1% a los costos de construcción.

Debemos reconocer que a partir de la administración de gobierno del presidente Martín Torrijos se comenzó a tomar más conciencia y aceptación a las personas con diferentes discapacidades; así mismo, como jóvenes preocupados por la igualdad y oportunidades de todos, sería ideal comprometerse a apoyar al Estado actual, quien debería promover y fortalecer más el diseño de políticas públicas, basadas fundamentalmente en los derechos de las personas con discapacidad gestionando su integración como ciudadanos del país, miembros de una familia y comunidad. Hoy es una nueva ocasión para comenzar a brindar una mano a todo aquel que la necesite; como parte de esta generación creamos en nosotros mismos, como seres diferentes, para aprender y transmitir nuestros valores y principios a todas las personas que carecen de ellos. Reforcemos la igualdad y el compromiso, para así tomar de forma silenciosa, las riendas de nuestro Panamá.

 

El Fin De Cerro Patacón…

El problema de la basura afecta de forma constante la calidad de vida de las ciudades de Panamá. En el plano operativo, lo podemos dividir en dos partes: primero, la recolección y el transporte de los desechos hasta un centro de procesamiento, y después, el procesamiento y disposición final de esa basura.

En este artículo haremos referencia a la segunda parte. Sin embargo, ambas están ligadas y se retroalimentan.

La idea que prevalece es la de que la basura se debe transportar a un lugar centralizado, para que sea incinerada o vertida y enterrada en un relleno sanitario. Algún porcentaje de la basura inorgánica es separado por las empresas, como parte de los programas de reciclaje y, también, por los pepenadores en el mismo relleno sanitario. Por eso, lo primero que debemos hacer es cambiar la idea de que toda la basura debe terminar en un relleno sanitario, y percatarnos de que la tecnología desarrollada en las últimas décadas permite otras opciones, no solo mucho mejores desde el punto de vista ambiental-técnico, sino rentables y autosustentables.

Hoy en día se cuenta con tecnología verde (por ejemplo, tecnología Pirsu–Arrowbio, tecnología Deisa, etc.), 100% automatizada, de centros completos modulares, para procesar de manera integral con agua reutilizable, aire, magnetos y filtradores, los desechos sin necesidad de clasificación previa. Estos separan los materiales reciclables, procesan en biodigestores los orgánicos con los que generan su propia agua, energía eléctrica, fertilizantes, material de construcción y un residuo final triturado, seco y saneado (10% del volumen inicial) que iría a un relleno sanitario, si no se logra reciclar o vender para otros usos.

Igualmente, si se desea incorporar a los pepenadores y a su familia como trabajadores del centro hay otras alternativas tecnológicas semiautomatizadas, que permiten la separación y el reciclaje por parte de dicho personal.

Si el Gobierno operara directamente o licitara a terceros esta concesión, los costos serían muy reducidos, porque la empresa generaría ingresos de la venta de los insumos reciclados, no incurriría en costos de energía eléctrica o vendería el excedente autogenerado hasta un nivel que pudiera no solo ser autosustentable, sino financieramente rentable. Una vez en funcionamiento, tanto en la ciudad de Panamá como en otros puntos del país, y dado el poco terreno que ocupan y el limitado residuo saneado que generan, se podría considerar la instalación en otro lugar fuera de cerro Patacón y de la urbe capitalina. Así se podría ubicar en Patacón una planta de energía eléctrica a base de gas metano, producto de la descomposición del relleno sanitario, o sanear y recuperar dichas tierras para el desarrollo urbano, tal como se hizo en el antiguo vertedero, hoy Costa del Este.

Con esta acción se evitarían los incendios de basura, los malos olores, la contaminación del aire, la proliferación de criaderos de mosquitos, la filtración y contaminación de las tierras y aguas subterráneas, así como permitiría generar oportunidades laborales para mejorar la calidad de vida de cientos de familias de pepenadores.

Sería interesante recopilar las experiencias en estas tecnologías en países como Israel, España, Argentina, México, Colombia y Guatemala –que ya tienen algunos años de funcionar– y evaluar las ventajas de adoptarlas y adaptarlas a las necesidades del medio panameño.

Por último, habría que adoptar una solución empresarial pública para resolver el tratamiento y disposición de la basura. Lo que servirá como un poderoso incentivo para hacer mucho más eficiente el proceso de recolección y transporte de los desechos a dicho centro de procesamiento, ya que dependerían de un flujo y volumen continuo y de calidad de esa materia prima para lograr la sustentabilidad y rentabilidad final de la planta. Con el cierre de cerro Patacón, podríamos eliminar un monumento a la desidia en la gestión ambiental y entraríamos en el siglo XXI, mirando al cambio y al futuro en pro de las nuevas generaciones. Pero esto sería materia de un futuro artículo.

 

Reagrupar Al Torrijismo Y Las Fuerzas Afines

El perfil ideológico y político de las acciones y el liderazgo de Omar Torrijos fueron propios de su época, pero esto no implica que su vigencia se agotó en aquel tiempo. Al contrario, lo que él tomó de aquel período fue un conjunto de anhelos, valores y principios que concretó dándoles un método eficaz por su adecuación al país y su circunstancia regional. Aunque la época ya no es la misma, como tampoco muchos de sus desafíos, coyunturas y actores, sí lo son los propósitos y valores, y el estilo de trabajo que le dieron vida al torrijismo, los que, frente a las nuevas exigencias y retos, son tan necesarios como antes.

Su vitalidad sigue activa al margen de cualquier partido político. De hecho, el torrijismo fue el movimiento dominante de la gestión gubernamental y la cultura política de los años 70, cuando el PRD no existía. Sus atributos se formaron en las luchas populares de las tres décadas anteriores y, tanto hoy como ayer, también los han compartido muchos compatriotas que no se consideran torrijistas. Lamentablemente, ahora ciertos voceros del PRD son ajenos a dichos valores y, como dice un veterano militante, ‘el torrijismo se ha quedado sin partido'.

Esa vigencia viene del ambiente cultural y moral en que se formó dicho modo de valorar, pensar y actuar que en los 70 pasó a llamarse torrijismo. Viene de las experiencias acumuladas desde la lucha contra el tratado Filós-Hines y la formación del Frente Patriótico hasta las siembras de banderas en la zona del Canal y la gesta del 9 de Enero, entre otras. De cuando el movimiento popular y patriótico aceleró el desarrollo de su conciencia y su fuerza. Y más allá de nuestras fronteras, del auge de los movimientos anticoloniales africanos y asiáticos —no es casual que Torrijos admirase a Amílcar Cabral—, de los movimientos insurreccionales latinoamericanos, las revoluciones del 68 y el movimiento norteamericano por los derechos civiles.

Eso caracterizó al torrijismo como un movimiento de liberación nacional. Y así lo demostraron tanto los adelantos sociales y patrióticos logrados por nuestro pueblo desde inicios de los 70 en los sectores agrario, laboral y de salud, la modernización institucional y el sistema de representación popular, como la independencia diplomática, la solidaridad latinoamericana y la capacidad de movilizar el respaldo mundial a las reivindicaciones panameñas, que fueron parte de ese ambiente internacional y se nutrieron de él.

Se puede incursionar en la política para uno de dos fines. El propósito virtuoso de cambiar una realidad injusta y atrasada. O el vicioso, de gozar las mieles del poder y el erario nacional. En los años 70, millares de ciudadanos se sumaron al torrijismo por su anhelo de rehacer al país, asumiendo un nuevo proyecto de desarrollo con justicia y solidaridad sociales. Ese proyecto impulsó una enorme transformación, que tras la muerte física de Omar quedó incompleta y sin consolidar.

En particular, se frustró la estrategia del repliegue democrático iniciado por él. Precisamente, la razón originaria del PRD era implementar ese aspecto del objetivo virtuoso: retornar a los guardias a su especialidad profesional y continuar el proceso revolucionario por medios participativos y electorales, con base en las organizaciones sociales y comunitarias. A este propósito de continuidad democrático-revolucionaria se debió el nombre que Omar le puso al partido. Pero su prematura muerte ocurrió cuando el PRD aún no estaba en condiciones de garantizar el repliegue, lo que favoreció el extravío del proyecto.

Todavía padecemos sus consecuencias. Al incorporar la economía canalera al patrimonio nacional, obtuvimos un país con fuerte capacidad de crecimiento, pero al que le usurparon aquel rumbo del desarrollo humano incluyente y sostenible. En consecuencia, un crecimiento desigual, injusto y corrupto, moral y cívicamente inaceptable. Por consiguiente, es indispensable reagrupar las corrientes torrijistas y afines para recuperar su partido y el

 

Leyes Mordaza A La Libertad De Expresión:

En mi condición de legislador de la República de Panamá durante el período 1999-2009, presenté a la consideración de la Asamblea Legislativa un anteproyecto de ley que derogaba las leyes mordaza de prensa, que fue sometido a una amplia discusión no solo en el ámbito nacional, sino internacional, especialmente por parte de la Sociedad Interamericana de Prensa.

Tomé esa iniciativa, porque era evidente que las leyes que regían en ese entonces representaban un atentado directo a la libertad de expresión. Me refiero, en especial, a Ley 68 y 11 de 1978.

Producto de esa amplia discusión en la Asamblea y la sociedad civil, esa iniciativa se aprobó. Así surgió la Ley 55 del 20 de diciembre de 1999, que derogó los artículos 15, 16, 17 y 19 de la Ley 11 de 1978, que eran lesivos a la libertad de expresión, al igual que se derogó, en todas sus partes, la Ley 68 de 1978, que creaba la Junta Técnica de Periodismo.

Vemos, ahora, con cierto grado de sorpresa, cómo esos mismos gremios de periodistas que nos apoyaron en la derogatoria de esas leyes mordaza, hoy respaldan una iniciativa legislativa que, a todas luces, interfiere, trastoca y restringe la libertad de expresión en Panamá.

Por ejemplo, el actual anteproyecto de ley propone la creación de una “comisión técnica-académica de periodismo” y un “tribunal disciplinario”, lo que supone reactivar las funciones de la tenebrosa Junta Técnica de Periodismo, que contemplaba la Ley 68 de 1978 (derogada), cuyos miembros decidían quién era periodista y quién no.

Por lo tanto, sugerimos que esta nueva iniciativa se someta a una gran consulta nacional, que nos lleve a eliminarla o, en su defecto, a que se limite únicamente a aspectos laborales o administrativos, sin afectar la libertad del pensamiento.

En mi concepto, se justifica la revisión de los asuntos laborales, especialmente en lo que a la remuneración económica se refiere, porque a pesar del excelente trabajo que realizan los periodistas en nuestro país –muchos de ellos sin horario de entrada ni salida– no se les reconoce económicamente esa labor profesional.

 

Acoso Escolar: “Bullying”

En los monederos falsos, novela del Premio Nobel de Literatura francés André Gide, se presenta el caso de un niño pequeño, tan acosado por sus compañeros de clase que se burlaban de él, lo maltrataban, le hacían la vida miserable, que toma un revólver de su abuelo y se dispara a su sien delante de todo el salón, para probarles que no era cobarde. Este caso real fue tomado de los periódicos parisinos del siglo pasado.

Intimidación infantil, maltrato, acoso escolar, es la principal causa de muchos suicidios en niños y jóvenes escolares, fenómeno que denominó ‘Bullying' el psicólogo sueco Dan Olweus, considerado una eminencia mundial. Olweus lleva más de 45 años tratando estos casos, a víctimas y verdugos, creó un exitoso programa de prevención. El doctor Olweus se dedicó de lleno a la investigación e intervención trabajando con niños y jóvenes en las escuelas de Suecia y Noruega, a partir del suicidio de varios jóvenes escandinavos víctimas de este flagelo. Hacia 1970 inició un programa a gran escala, considerado el primer estudio científico sobre los problemas de ‘bullying' en el mundo. En 1980 condujo el primer estudio de intervención en el mundo, documentado un número significativo de casos con efectos positivos, reduciendo considerablemente esta catástrofe. Pionero en este tema a nivel mundial, creó una estrategia con la que ha reducido los abusos entre estudiantes en colegios de distintos países, como Japón, Inglaterra y EE.UU., consiguió que se pasaran leyes e involucró a varios Gobiernos a respaldar una fuerte campaña en contra del ‘bullying'.

El término ‘bullying' implica la conducta de cualquiera que maltrata otro ser humano utilizando fuerza física, autoridad, poder social o intelectual, culminando en una violencia desigual. Abuso infantil, de niños a otros o de adultos a niños. ‘Bully' se aplica a adultos y niños, parejas o socios. Abuso de contemporáneos. Hay ‘bullying' físico, cibernético, verbal. Más del 90 % de las personas ha sufrido de acoso, de estos abusos, según diversas investigaciones hechas en los países nórdicos y EE.UU.

La mayoría de los casos se dan en temprana edad en los primeros años de primaria y es por lo general de uno o varios niños o niñas contra un infante más débil o indefenso que tiene que soportar maltratos de toda índole: abusos, golpizas, insultos, burlas. En todos los casos hay una diferencia marcada en cuanto a la fuerza del verdugo fanfarrón, abusador, victimario y la víctima.

La tortura puede ser diaria, semanal o cada dos o tres días, esto produce pánico, terrores nocturnos, inseguridad, miedos y ausentismo escolar hasta terminar mal o en suicidio. Las secuelas del acoso pueden durar toda la vida.

Debemos reconocer la destructividad de la provocación y persecución de los compañeros de clase, las actitudes sociales, entre adultos, los modelos que provocan, instigando, incitando, azuzando, provocando e inspiran el acoso escolar, enfocando como objeto de agobio a las víctimas más débiles.

William Voors lleva más de treinta años de experiencia clínica, aconsejando y tratando con jóvenes acosadores, perpetradores y sus víctimas. Voors ha evidenciado este fenómeno como una avalancha de sentimientos de rabia, asombro, miedo, ‘shock'. Muchas veces el maltrato y los abusos son ignorados por adultos, porque los instigadores o perpetradores son niños. El intimidador se siente superior a su víctima.

Queremos que nuestros niños estén seguros de que puedan participar en las actividades escolares que les interesan, que descubran quiénes son y disfruten sus amistades, que tengan una niñez feliz. La idea de que todos los niños se comportan de la misma manera y que por eso se dan escenas de abusos, es falsa.

La Sociedad Americana de Sicología (EE.UU.) dio a conocer un extenso documento con las últimas estrategias creadas por Olweus para detener y prevenir el amedrentamiento en los colegios, con las cuales ha logrado reducir en Europa y EE.UU. las tasas de violencia entre escolares de 30 % a 50 %, así como los casos de vandalismo, abuso de alcohol y ausentismo.

 

Irregularidades e investigaciones

El Ministerio Público realiza una labor extraordinaria, al investigar las irregularidades que, según se aduce, cometieron durante el gobierno del expresidente Ricardo Martinelli algunos funcionarios relevantes, amigos, empresarios y bancos que actuaron como cómplices.

Aunque la investigación ha cubierto el lado más visible de estos casos y, a pesar de que han pasado más de 12 meses de averiguaciones, todavía hay mucho por descubrir. Es indiscutible que el Ministerio Público no es culpable del atraso, debido a lo difícil de su trabajo y a la falta de personal idóneo pendiente de nombrar, porque el Ejecutivo no ha proveído los fondos para designar más fiscales y personal. Son muchos los funcionarios o personas que faltan por indagar. Otros están prófugos o “pasan agachados”. Llama la atención que aún no se haya indagado a exfuncionarios de alto perfil como Jimmy Papadimitriu, la persona de mayor influencia y poder en el gobierno Martinelli y asesor personal, a pesar de señalamientos que lo vinculan con el caso de los terrenos en Juan Hombrón, a nombre de sus familiares, o de los 300 millones de dólares que –según un abogado– depositó en bancos de Andorra, entre otros negociados. Papadimitriu fue el funcionario de mayor confianza de Martinelli y, posiblemente, conoce muchas de las irregularidades cometidas durante los años en que fue ministro de la Presidencia.

Algo parecido ocurre con la excontralora Gioconda de Bianchini, quien se ha reportado enferma. Ella debería ser interrogada, no vaya a ser que todas las irregularidades que conoce de primera mano caigan en el olvido. Otro que debería ser llamado a declarar es el exdirector de la Autoridad de Turismo de Panamá, Salo Shamah, que solicitó coima para sacar de la cárcel a Mayte Pellegrini (según las declaraciones de la afectada) y que fue señalado por aplicar un millonario sobrecosto en la construcción de un nuevo Centro de Convenciones de Amador, hoy paralizado.

Además, ¿cómo es posible que no se investigue a West Valdés ni a Iván Clare, de Financial Pacific, por el manejo irregular de millones de dólares de los depositantes de esa casa de valores o por las negociaciones ilegales hechas a la sombra de “información confidencial”, como se ha publicado en varios medios? ¿Qué ha sucedido con las investigaciones por la desaparición de Vernon Ramos, el intento de homicidio del funcionario Gordón y con el prófugo sospechoso?

Hay preguntas que requieren respuestas, por ejemplo, ¿por qué no se solicita la extradición de Chichi De Obarrio, Ricky Calvo, Nicolás Corcione, Gabriel Btesh u otros? La mayoría está en Estados Unidos, al igual que Martinelli. En esa nación no hay peor delito financiero que el lavado de dinero o hacer negocios por medio de información privilegiada, lo que castiga la Securities and Exchange Commission, agencia federal que investiga estos delitos y, como aquí se ha afectado a ciudadanos estadounidenses, a ellos se les podría denunciar. Seamos conscientes de que el hecho de que se indague o impute a una persona no significa que sea culpable. Lo importante es que haya justicia igual para todos. Los que merecen ir a la cárcel, que sean encarcelados y aquellos inocentes, deben ser absueltos.

Hablando de la Carrera Administrativa

Desde que tengo uso de razón he escuchado sobre la conveniencia de implementar en Panamá un régimen de carrera administrativa que les brinde estabilidad a los funcionarios. El servicio civil es un anhelo consagrado en la Constitución. Ningún Gobierno deja de aclamar las bondades de un sistema que no solo provea seguridad económica, sino que también permita el desarrollo profesional y el ascenso a niveles superiores de la administración pública en base a los méritos propios del individuo.

Hoy se retoma el concepto y ha sido incluido en la agenda legislativa adoptada por la mayoría de diputados que componen la última alianza política parlamentaria. Sin embargo, llegar a un consenso sobre la filosofía y el contenido de una ley sobre el tema debería ser más fácil y factible que ponerla en ejecución y administrarla adecuadamente, de suerte que rinda los frutos deseados sin que quede desdibujada en el camino.

Muchos intereses partidarios entran en juego y en consideración para viciar todas las buenas intenciones que pudieran existir. En 1994, después de muchos meses de amplias consultas y estudios, se presentó a la Asamblea un proyecto de ley de carrera administrativa y se logró la aprobación de un marco general de una ley que le diera esa estabilidad al funcionariado. Por falta de tiempo adecuado en las postrimerías de un Gobierno de salida, no se inició de inmediato la incorporación de funcionarios al nuevo sistema y se optó por dejar esa tarea al nuevo Gobierno. Lamentablemente nada se hizo en firme; solo hasta el último año fue cuando rápidamente se trató de dejar algunas dependencias amparadas bajo el régimen del servicio civil.

Durante los siguientes años ocurrieron las previsibles consecuencias de la falta de la puesta en marcha de la ley aprobada en 1994, hasta llegar al inicio del anterior Gobierno, cuando en el 2009 se desarticuló en efecto el régimen de la carrera administrativa y se anularon todas las incorporaciones hechas desde el 2007.

El resultado de estos ejercicios es que el funcionariado se encuentra en estado de inseguridad, aspirando solo a una indemnización decretada en caso de despido. Su estabilidad y fuente de ingresos depende de la voluntad de las autoridades superiores.

El acuerdo logrado por la bancada mayoritaria de la Asamblea Nacional permite albergar un optimismo reservado sobre la posibilidad de romper con prácticas pasadas y acabar con la costumbre de utilizar a los 200 000 funcionarios como monedas aprovechables en tiempos políticos. El tema es apetitoso para las campañas electorales.

Todos debemos cerrar filas y apoyar una iniciativa como la que se contempla. Dotar al ciudadano de auténtica oportunidad para ingresar al servicio civil, gracias a su preparación y no al compadrazgo o amiguismo político; y al funcionario, de la seguridad de poder hacer carrera en la administración pública, serían pasos firmes para modernizar el Estado. Con esas premisas, la burocracia estatal debería funcionar con la honestidad y con la eficiencia básica que proveyera los servicios que la ciudadanía demanda. Sería como una maquinaria eficiente que marcharía a velocidad satisfactoria para todos, pero en la dirección que cada gobernante escoja enrumbarla.

Ahora la intención surge nuevamente, luego de antecedentes frustrados y frustrantes en el pasado. Sería necesario complementarla con una ley general de sueldos, que disponga remuneraciones uniformes que dependan del nivel de responsabilidad de cada posición, y con una ley que disponga la simplificación de todos los trámites burocráticos para reducir el costo económico y social involucrado en los trámites que se deben cumplir en cualquier oficina pública. Les haríamos la vida menos complicada y más feliz a los panameños.