Ayú Prado: ‘El viaje está justificado’
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, José Ayú Prado, defendió su licencia con sueldo para viajar al Vaticano y participar en el foro sobre justicia coordinado por la Organización de Estados Americanos (OEA) y por el Instituto de Diálogo Interreligioso de Buenos Aires (IDI) sobre el tema: “América en Diálogo-Nuestra Casa Común”.
“Se trató de un foro jurídico. Por eso estaba presente, por ejemplo, el presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), Roberto de Figueiredo Caldas. Además, el viaje está justificado porque la OEAme invitó”, justificó en conversación con este periódico.
Su viaje al Vaticano fue cuestionado por el magistrado Harry Díaz en una carta, al señalar que estos viajes ‘no representan beneficio alguno para la administración de justicia’…Estoy algo confundido con esa nota, porque yo no estaba en Panamá para recibirla. Quizá el título del encuentro [Primer encuentro del Diálogo intercultural e interreligioso] confundió al colega de la Corte Suprema, pero se trató de un foro jurídico.
Las personas están un poco inquietas porque uno viaja, pero yo no puedo irme de viaje y regresar con una bolsa de dinero bajo el brazo, diciendo esto es lo que conseguí afuera: estas cosas no funcionan así.
¿Y el viaje a España?
Recibí una invitación de la Universidad Menéndez Pelayo, en Santander, para dar una conferencia y tendré varias reuniones que servirán a Panamá para implementar la carrera judicial, la digitalización de archivos y la lucha anticorrupción.
En este caso, además, el viaje lo paga la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés).
Los auditores de la Contraloría General están revisando la partida presupuestaria de 2015 correspondiente a viajes y viáticos. Y yo hace cuatro meses que tengo un equipo de auditores dentro de la Corte Suprema investigando toda la partida presupuestaria, que también incluye los viajes al interior, así como los viajes de los funcionarios judiciales y administrativos.
¿Le parecería bien que se implantara un reglamento que someta a aprobación previa los viajes de los magistrados?
Cada vez que he puesto en la agenda del pleno este tema, nunca se llega a discutir.
¿Por qué?
Pregúntele a los otros ocho, yo no soy el único.
Algunos sectores de la sociedad criticaron que usted “actuó al margen de la ley” en los nombramientos de funcionarios para el sistema penal acusatorio (SPA).
Estamos muy preocupados en la obtención del recurso para lograr conseguir el mejor personal. Si queremos obtener una carrera judicial que supere lo anterior, tiene que ser un personal muy técnico y para ello hay que darle un incentivo salarial, pero también de instalaciones.
La partida presupuestaria que se nos asigna está dentro de la ley de los presupuestos generales del Estado. Para tomar esa partida y usarla en otro rubro, si no consigo el visto bueno del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y de la comisión de Presupuesto de la Asamblea, es un delito de malversación. En este caso, nosotros solicitamos tres cosas: crédito adicional, traslado de partida interno, y traslado de partida entre instituciones. No nos funcionó ninguna de las tres.
Pero el año pasado, el MEF le aprobó una partida de $10 millones para implementar la carrera judicial.
Eso es mentira, eso está en la imaginación de alguien. Lo que ocurrió es que el ministro del MEF [Dulcidio De La Guardia] fue a una reunión del pleno de la Corte y prometió $10 millones para la carrera judicial.
Ese incremento del presupuesto no ha sido concretado. El SPA se ha implementado, pese a los insuficientes recursos que nos dieron. Yo pedí $22 millones para la carrera judicial y no nos dieron ni un solo recurso.
¿Entonces cómo puedo contratarlos?
En mayo, la Corte pidió la extradición de Martinelli.
¿En qué situación se encuentra esta petición?
En ese expediente yo estoy impedido, porque se acumuló a otro que yo trabajé como procurador.
Usted fue una de las personas interceptadas por el expresidente Ricardo Martinelli. ¿Le asusta el contenido de las conversaciones que puedan estar en su poder?
Mi número particular está en la huella digital de las máquinas. El fiscal auxiliar de la República logró recuperar unos extractos, pero se escuchan de manera intermitente y no los puede usar como prueba.
Son dos conversaciones privadas con mi esposa y no hay nada relevante. Según el testigo protegido que declaró, se intentó hacer más grabaciones, pero no pudieron técnicamente. Básicamente, porque mi teléfono se dañó.
¿Usted quiere ser reelegido como presidente del Corte?
Yo no le he pedido el voto a nadie. Nunca quise ser reelegido, fue una sorpresa.