Familia Y Valores Morales
Cada época tiene su forma y metodología de criar a los niños. Recuerdo de la infancia cuando mis padres conversaban con algunas personas, yo me ponía contento, porque era el momento que no estaba vigilado por mis padres. Además, no podía escuchar la conversación de los adultos. ¡Cómo los tiempos han cambiado! Hoy, las nanas son las que cuidan a los niños y ayudan a nuestros hijos en las primeras tareas de la niñez. En un periódico de la localidad en tema de empleo, exigían que las nanas debieran tener conocimiento en el uso de la tecnología. ¡Cómo delegamos nuestra responsabilidad!
En estos tiempos modernos, ambas parejas trabajan y hay muchas teorías como: la liberación de las mujeres, la inflación, padres irresponsables, el Código de la Familia. Al final debemos hacer un alto y volver a analizar ¿qué le está sucediendo a la familia panameña y a los valores morales? Si mis padres solo llegaron hasta sexto grado de una escuela pública. No existía prekínder ni kínder, no habían busitos colegiales, salones con acondicionadores de aire. Hoy, tenemos todo a nuestro alcance y vemos la desintegración familiar, niñas embarazadas, el maltrato a la mujer, beca universal, crímenes horrendos, drogas, promiscuidad sexual, alto consumo de bebidas alcohólicas entre las damas y menores de edad, la adicción a la tecnología… ¿y los valores dónde están?
Si sabemos que el pilar de la familia se fundamenta en valores, ¿por qué la familia panameña está viviendo una crisis en valores, credibilidad y confianza, donde la cabeza del hogar son los padres de familia, que están dando malos ejemplos en esta sociedad panameña? Supuestamente las personas que tienen mejor educación y vienen de las mejores universidades del mundo deberían dar lo mejor de sí.
Cuando miramos el escenario de nuestro país, observamos presidentes, ministros, diputados, magistrados y empresarios que están siendo investigados, juzgados por su mal proceder. Lo lamentable de todo esto es que la familia queda involucrada directamente en esos procesos de corrupción. Porque la mayoría de las veces existe un vínculo familiar, ya sea político, empresarial y social que termina en nepotismo.
Es importante que regresemos a nuestro principio social que es la familia en valores. Te podrán condenar y salir de la prisión. Pero la sociedad moralmente no te perdonará a ti y ni a los descendientes de esa familia. Pensemos más en la familia antes de cometer una falta social. Le estamos enseñando malos hábitos a esta nueva generación.
¡Lo que era malo en el pasado, hoy la sociedad lo está aceptando como bueno! Lo interesante es que las clases sociales siempre señalaban a los hijos de la cocinera como seres despreciables por su comportamiento ante la sociedad. Mateo 7:1:3: No juzguen a los demás y no serán juzgados ustedes. Porque de la misma manera que ustedes juzguen, así serán juzgados, y la misma medida que ustedes usen para los demás, será usada para ustedes. Con esto quiero decir que todas las clases sociales quedaron al descubierto con un historial de malas conductas y valores morales que dejan mucho que decir.
Juan 8: 7:9: Aquel de ustedes que no tenga pecado, que arroje la primera piedra. Al oír estas palabras, se fueron retirando uno tras otro, comenzando por los más viejos, hasta los más jóvenes. Eclesiastés 12:14: Dios juzgará todas las acciones, aun lo que está oculto, tanto el bien como el mal.
Esta sociedad panameña no puede continuar desarrollándose de esa manera, porque no estará dando los frutos necesarios de un buen legado familiar. Dejemos de enfocarnos tanto en las cosas materiales y el amor al dinero que es parte de la causa de nuestra situación social e institucional y familiar, busquemos más a Dios que es nuestra salvación.