Reflexiones sobre la VII Cumbre de las Américas
El Centro de Convenciones ATLAPA (Panamá) será del 10 al 11 de abril de 2015, la capital de la Democracia en América, debido a que en nuestro país se efectuará la VII Cumbre de la Américas. El norte de este cónclave será el debate sobre el futuro del continente. Panamá, es la anfitriona de la cumbre hemisférica y se gasta 15.5 millones de dólares destinados para dicho evento. Solo en la remodelación temporal de ATLAPA, el gasto fue de 3.5 millones de dólares. (construcción de paredes, techos, amueblar las salas de reuniones, etc.).
Reunir a los Jefes de Estados para discutir aspectos relevantes sobre la Geopolítica del continente merece el beneplácito de los panameños; no obstante, a nuestro juicio, el gasto excesivo para la VII Cumbre de las Américas esquilma el alma de los que no tienen voz, inclusive, de los que viven en condiciones paupérrimas radicalizado por la extrema pobreza. Estamos seguros de que la cumbre no impedirá que la canasta básica siga aumentando vertiginosamente; afectando a los que nada tienen, tampoco solucionará la escasez o ausencia del líquido vital en las comunidades periféricas de la cuidad capital, y otras poblaciones no menos importantes del país. Sr. Presidente, ¿el dinero que se gasta en la cumbre aportará algo para el pueblo a corto plazo?
El presidente de República de Panamá, Juan Carlos Varela, está obligado a demostrarle al mundo que esta cumbre servirá de marco referencial para sanear nuestra incipiente democracia, ya que la corrupción extendió sus tentáculos y penetró en las entrañas de las instituciones del Estado sin miramiento alguno. Insisto, el ‘talón de Aquiles’ de la democracia es la corrupción. Sin embargo, este mal que afecta las instituciones democráticas tendrá solución cuando los que dirigen la nave del Estado entiendan, de una vez por todas, que los piratas de cuello blanco que saquearon el erario deben ser castigados con todo el peso de la Ley.
La gran novedad de este magno encuentro de mandatarios del Nuevo Continente será la presencia de dos presidentes de ideales antagónicos: Barak Obama de Estados Unidos y Raúl Castro de Cuba. Será la primera vez que estos dos jefes de Gobierno se verán las caras en el mismo escenario. Esperaremos que la VII Cumbre de las Américas, sea el punto de encuentro para que el coloso del norte suspenda el embargo comercial contra la isla de Cuba, pues, el bloqueo no ha surtido ningún efecto político para derrocar a los Castros en más de medio siglo.